Generaciones

De ti, recuerdo esa ternura
Y las voces de tu aliento,
De tu piel, su suave textura
Y de tus labios, el firmamento.

Quizá dejaste de correr mi cuerpo,
Donde cansada siempre llegabas,
Para fundirte de su alimento,
Y de aquella luz que irradiabas.

Fueron momentos duros,
En aquel rincón de ilusiones,
Con música y sentimientos puros,
Al gemir de nuestras pasiones.

Ya no son aquellos tiempos,
Los que recuerdo de amores,
Son las voces de los vientos,
Y la ilusión de mis cuentos,
En mi diario de temores.

Te fuiste, o tal vez me fui,
O nos fuimos sin lamentos,
No fue todo lo que di,
Tampoco mis sufrimientos,
Era esta esencia piadosa,
Que aliviaba padecimientos
En tu figura de Diosa.

Ya no estás en la distancia
Y no encuentro mis tristezas,
Sólo vago en mis sentencias,
Sin que canten tus purezas,
Invocando penitencias.

JULIO MONCANUT